Para los que no conozcan la Ley del Espejo es aquella que nos dice que las personas con las que nos cruzamos y tenemos interacción, nos muestran aquello que en nosotros mismos es más difícil de ver.

 

Esta forma de entender las relaciones interpersonales es bidireccional. La gente con la que me cruzo me muestra cosas mías y yo les muestro cosas de ellos/as.

 

Soy consciente de que no es tan fácil de ver como lo acabo de decir arriba, pero ayuda bastante a entender y a tener empatía con el comportamiento del otro/a.

 

Me refleja lo que no nos gusta, lo que nos gusta, lo somos capaces de ver y lo que nos somos capaces de ver.

 

Esta técnica de vida nos puede servir para aprender a ver nuestras cualidades positivas, nuestras capacidades, nuestras aptitudes que de otra forma a veces, no somos capaces de tener presente.

 

Observa a la gente que conoces desde hace tiempo.

 

¿Qué te gusta de ellos/as? ¿Qué te llama la atención?

 

Ahora después, eso que te gusta de ellos/as. ¿Lo identificas en ti? Piensa bien.

 

Quizás no lo muestres de la misma forma. Quizás tenga otro formato.

 

Quizás se manifiesta de forma diferente.

 

Pero seguro que está dentro de ti.

 

-Ruth Fernández-