Recuerdo que en algún momento alguien de mi confianza me dijo que cada cierto tiempo las parejas deberían pararse a pensar y reflexionar porqué siguen juntas. En su día me pareció que  ese mensaje no iba conmigo. Pero hoy, después de diez años con mi chica, me ha venido a la cabeza.

Cuando conocí a Claudia me pareció la mujer más maravillosa del mundo y la más divertida. El tiempo que pasábamos juntos transcurría entre risas y bromas mutuas. Tenía la sensación de que al lado de ella, todo era fácil. Podía ser yo sin que me pusiera mala cara o me mirara raro. Mi pensamiento giraba en torno a ella.

Hoy hace diez años que empezamos a salir. Tenía intención de celebrarlo con ella. Quizás una cena en algún restaurante chulo, después una película o unas copas para celebrarlo. Pero me ha dicho que no. Que mejor lo dejamos para el sábado que habrá descansado. Esta respuesta me ha pillado algo descolocado, no me esperaba que me dijera que no. No he sabido cómo reaccionar.

Es cierto que hace tiempo que casi no nos vemos, hablamos poco y nuestra relación es prácticamente por teléfono. Soy consciente de que algo nos está pasando, pero me ha impresionado su negativa.

Hablando con uno de mis amigos, me recomendó un ejercicio para intentar descubrir qué nos estaba pasando. No tenía nada que perder por intentarlo. Así que me fui a la oficina, cogí una libreta y un boli y me dispuse a escribir todo aquello que me sigue uniendo a Claudia.

Vaya no es tan fácil como parece. Tengo claro que la quiero. Cada mañana cuando me levanto siempre la  miro sin que ella se dé cuenta. Me encanta verla dormir a mi lado, sentir su respiración tranquila y saber que sigue estando ahí, junto a mí. Pero supongo que debería haber más cosas. Algo más tendremos los dos como para llevar todo este tiempo.

Escuchar su risa. Adoro oírla reír. Es capaz de reírse prácticamente de cualquier cosa. Por muy pequeña que sea. Además es muy contagiosa, por lo que casi siempre acabo riendo con ella. En ese momento, vuelvo a enamorarme de ella.

Podemos pasar horas hablando del tema que sea. Siempre que nos pasa algo, sea bueno o malo, lo primero que hacemos es llamar para contárselo al otro. A mí personalmente, me gusta pedirle consejo cuando tengo que tomar alguna decisión. Incluso con cuestiones de mi trabajo. Tiene una capacidad inmensa para analizar las situaciones y ver las posibles opciones para solucionarlas.

Que no se me olvide apuntar, su espontaneidad. Ya sé que antes me he quejado de que me ha dicho que no a lo de salir esta noche, pero esto no es propio de ella. Siempre que le he propuesto algo me ha dicho que sí. Además a cada instante se le ocurren planes, actividades de manera rápida y las llevamos a cabo. La vida a su lado no pierde nunca la sorpresa.

Empieza a gustarme esto de analizar qué me une a mi chica. Igual no estaría mal que lo hiciéramos juntos. Seguro que es mucho más fácil y más enriquecedor para la relación. Puedo planteárselo  esta noche en casa.

Ya tengo el plan para hoy. Cuando llegue voy a preparar la cena, algo que a ella le guste mucho. Abriré una botella de vino. Y después con el postre podemos hacer este ejercicio. Seguro que nos ayuda a darnos cuenta de lo que nos está pasando ahora y a solucionar cualquier problema que hayamos tenido.

Prometo no dejar pasar otros diez años para dedicarle un tiempo a conocer qué me sigue uniendo a mi chica.

-Ruth Fernández-

Desde Caricias y Besos nos gustaría acompañarte en ese camino de autoconocimiento y crecimiento personal dotándote de todos los recursos necesarios para que puedas alcanzar una vida plena y feliz. Y de este modo la puedas llenar de pasión.

Si deseas encontrar pareja, aumentar la pasión con ella y mejorar tus relaciones, pincha en Caricias y Besos, y dale a “Me Gusta”.

www.facebook.com/relacionesdepareja/

Visita nuestra web:

www.cariciasybesos.com

Allí encontrarás más artículos e información.